Serinyà es un pequeño pueblo de la provincia de Gerona de aires rústicos. Aquí me podéis ver en este vídeo.
Durante el recorrido, tendreis la oportunidad de admirar la arquitectura tradicional de la zona, con sus casas de piedra y balcones que dan testimonio de siglos de historia.
El monumento más destacado es la iglesia de San Juan Bautista en Seriñá, un ejemplo destacado de la arquitectura románica catalana, es una joya histórica del pueblo. Construida en el siglo XII, su estructura de piedra y sus tesoros artísticos en su interior, como un retablo gótico del siglo XV, cuentan la historia de la región. El casco antiguo de Seriñá, con sus calles empedradas y fachadas de piedra, invita a los visitantes a sumergirse en su encanto medieval y campestre. Es un lugar donde la historia cobra vida y donde el tiempo parece detenerse.
Otra de las cosas destacadas de Seriñá es su antigua lavandería pública, de la época de cuando todavía no se habían inventado las lavadoras. Es un lugar tranquilo de ambiente rústico, para dar un paseo. Y en eso os dejo.
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