La festividad de los Reyes
Magos es cada vez más rara y extraña, hasta el punto que ya ni se anuncian los
juguetes en la televisión, como si hubiera algunos impedimentos manifiestos que
no lo consienten.
Además tampoco ha habido
anuncios de turrones, o de cava, tan tradicionales por estas Fiestas Navideñas,
lo cual da para pensar que si existe alguna intención silenciosa de hacer que
esas fiestas desaparezcan en su sentido cristiano, y que sean sustituidas por
unas fiestas del consumo con unos nuevos hábitos impuestos por la Agenda 2030.
Es el signo de los nuevos
tiempos, que no van a por mejor.
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