La agenda 2030 y la inmigración son los dos principales problemas a los que se someten los franceses, de los cuales, una inmensa mayoría de galos están muy descontentos.
Para no dividir los votos, se han formado tres grandes grupos políticos básicos: el Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen, el Nuevo Frente Popular que lleva con ellos a Jean-Luc Mèlenchon, y el Renacimiento del actual presidente Emmanuel Macron.
Sólo la formación liderada por Marine Le Pen, y cuyo candidato a primer ministro de Francia es Jordan Bardella, son los que están contra la Agenda 2030 y la inmigración, que de ganar las elecciones francesas, será positivo para Francia, pero no para España.
Porque la victoria del partido patriótico, aunque puede hacer algo para frenar la nefasta Agenda 2030, tiene de malo que la inmigración que no sea rechazable en Francia, acabe por desplazarse hacia España donde Pedro Sánchez sigue practicando su política de fronteras abiertas, consintiendo que nuestro país se vaya llenando cada vez de más inmigración, con todos los problemas de ello conlleva aún mucho más agravados.
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