A raíz del asesinato de Mateo, el niño de Mocejón, en la provincia de Toledo, han salido todo tipo de comentarios en las redes sociales, y algunas expresiones no han gustado al gobierno Sánchez, por lo que ha instado a la fiscalía ( que por desgracia depende del gobierno) para que se ponga a perseguir a las personas que según el gobierno expresan opiniones que el propio gobierno califica de “delitos de odio”, igual como ya están haciendo en La Gran Bretaña, que incluso se les mete en la cárcel y se les arruina con sanciones.
Es la forma que va a tener el gobierno para tener acallada a la gente que no piensa o no está de acuerdo con los propósitos del gobierno en temas dispares, entre ellos la delincuencia y la inmigración, que está muy protegida por el propio gobierno.
Esta actitud violenta muy gravemente contra el artículo 20 de la Constitución Española que ampara y reconoce el derecho a la libertad de expresión. Con Pedro Sánchez y sus demás cómplices políticos, están haciendo que España deje de ser una democracia con libertades, para pasar a ser una dictadura opresora contra sus propios ciudadanos.
La fiscalía debería de estar para perseguir la delincuencia y la inmigración ilegal, pero en vez de esto, la protege, y se utiliza por parte del gobierno para perseguir a los ciudadanos que se sienten indignados y oprimidos, violentando su libertad de expresión. Y que esto se normalice y ocurra en España es algo lamentable.
Pero con internet estas intenciones del gobierno acabarán siendo un fracaso y la libertad de expresión encontrará su propio lugar por determinados espacios de internet, donde no se puede poner puertas al campo. Sólo que los ciudadanos tendrán que ir con más cuidado para eludir el control y la opresión gubernamental.
No podemos consentir que nos opriman ni que nos engañen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario