Pedro Sánchez dijo que el futuro del mundo solo tiene dos opciones: derecha o izquierda. Lo traduzco: libertad o Agenda 2030, o mejor dicho: libertad o dictadura neocomunista.
Por eso todos los partidos afines a la Agenda 2030, han constituido un cordón sanitario contra lo que llaman “ultraderecha”, que en realidad son los patriotas partidarios de la libertad y en contra del globalismo de la Agenda 2030.
En Francia, el gobierno de Michael Barnier está a punto de caer por una moción de censura, tanto por parte de la izquierda del Nuevo Frente Popular, como por parte de la derecha patriota el Rassemblement Nacional de Marine le Pen, por la aprobación vía decreto y sin apoyo parlamentario de los presupuestos de la Seguridad Social. Pero la Constitución francesa no permite nuevas elecciones legislativas hasta que hayan pasado un año de las últimas. Le Pen ha anunciado que apoyará todas las mociones de censura, para dejar a Francia sin gobierno, aunque la gobierne un gabinete de tecnócratas, sin respaldo parlamentario que lo legitime, y solo esperando a las próximas elecciones legislativas.
Y esto es importante, porque se trata de esta deriva hacia la libertad o hacia la dictadura, como decía Pedro Sánchez: derecha o izquierda. Todo son etiquetas, pero se trata de democracia liberal, o democracia dictatorial camuflada de neocomunismo tal como es la Agenda 2030.
En EEUU ya ha ganado Donald Trump, en Argentina Javier Milei, y es de esperar que en Europa llegue el momento de los abanderados de la libertad, que es España lo representa Santiago Abascal.
Por esto los movimientos de Francia son importantes, siendo un país muy castigado por la Agenda 2030 y la invasión inmigrante, para ver si la deriva irá hacia las libertades o hacia la dictadura sin libertades de la Agenda 2030.
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